No faltó nadie. El mundo del toro se volcaba por completo esta tarde para acompañar a Curro Romero, XV Premio Taurino de ABC, en una jornada emocionante que ha servido como homenaje a una de las figuras indispensables de la historia de la tauromaquia. El acto, patrocinado por la Consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural de la Junta de Extremadura, Nautalia Viajes y Plaza 1 y con la colaboración de Jamones Montaraz comenzaba poco antes de las 14 horas, pero más de dos horas antes los invitados comenzaban a llenar la sede del periódico en un ambiente de expectación y entusiasmo que solo Curro Romero es capaz de generar. Y es lógico, estamos ante una de las cumbres, no solo del mundo de los Toros sino del arte y la cultura españolas.
Tras las palabras de bienvenida de la conductora de la gala, Elena Sánchez, tomaba la palabra Ignacio Ybarra, presidente de Vocento, para recordar a los presentes que en ABC «somos muy taurinos; solo hay que mirar hoy a este tendido para comprobar que se respira arte, campo y tradición. Pero, sobre todo, amistad». Tras sus palabras, la glosa del premiado, a cargo de Alberto García Reyes, director de ABC de Sevilla. En una intervención de altos vuelos, García Reyes explicó que Curro «ha construido una alianza indestructible entre los dos grandes valores que aúna este premio: el arte y la verdad». Y también que la palabra de Curro es como su toreo: una profunda expresión artística que está enemistada con la prisa». Sus palabras, plagadas de anécdotas, confidencias y un cariño que traspasaba el escenario, nos recordaban que, para Curro, «el toreo es amor. Amor a su familia, a sus hijas, a su nieto Oliver y, cómo no, a Carmen Tello. Hace unos años le hizo una declaración de amor en público durante la recogida de un premio que ningún actor de cine ha superado: «Cuando yo toreaba -decía Curro-, no me acordaba de nadie, ni de mi padre, ni de mi madre, ni de mis hijas. De nadie. Sin embargo, desde que conocí a Carmen sólo toreaba para ella. ¿Qué tendrá el amor que puede con todo?».
Su intervención, muy aplaudida, dio paso a la de D. Ignacio Higuero de Juan, consejero de Gestión Forestal y Mundo Rural de la Junta de Extremadura quien recalcó la apuesta del gobierno del que forma parte por el toro, por el campo, por la ganadería y su apoyo a la tauromaquia. «No tengo palabras para describir mi emoción. Curro siempre será un ídolo, un ejemplo y esperamos que sirva de ejemplo a los que vengan detrás», afirmó.
Tras las intervenciones, el turno de Curro Romero, que subía al escenario visiblemente emocionado, ayudado por Santiago León Domecq, teniente de hermano mayor de la Real Maestranza de Sevilla y el director de ABC, Julián Quirós. Su discurso, breve y natural, como su arte, lo leyó su esposa, Carmen Tello: «Madrid me ha querido como Sevilla y, cuando las cosas no salían como quería, siempre ha sabido esperarme. Cuando esta ciudad te acoge lo hace para siempre. Hoy vuelvo a encontrarme con todos los madrileños a los que tengo que agradecer el cariño con el que me han tratado toda la vida». La intervención la remataba el propio Curro Romero, para agradecer a «ABC y a mis compañeros, que me acompañan tan cariñosamente y que han venido a favor de querencia. Y gracias a Madrid». Sus palabras arrancaron una larguísima ovación por parte de los asistentes que, en pie, quisieron agradecer al maestro su esfuerzo. La referencia a sus compañeros era más que pertinente, puesto que allí quisieron estar Ortega Cano, Campuzano, El Soro, Espartaco, Roberto Domínguez, Ortega, Aguado, Urdiales, Uceda Leal o Emilio de Justo, entre otros. Tras la ovación, el acto prosiguió con una soberbia actuación de Marina Heredia, quien en su tema ‘A Curro Romero’ recordó que «me dijo Curro una vez: ¡Qué difícil es comer despacito cuando hay ganas de comer!».
El acto terminaba con una foto de familia de todos los maestros presentes, dando paso al cóctel en el que el mundo taurino, social y empresarial ha querido unirse al homenaje a Curro Romero.
