Han hecho falta únicamente tres espectáculos -‘Iliria’, ‘Los Remedios’ y ‘Cluster’- para que ExLímite despierte la atención del público cuando se anuncia un nuevo trabajo suyo. ‘Ficciones‘ es el nuevo proyecto de esta compañía que dirigen Gérard Imbert y Juan Ceacero. Éste último es precisamente el director de la función que se estrena mañana, 8 de mayo, en los Teatros del Canal de Madrid. El texto es de Fernando Delgado-Hierro y los intérpretes son Javier Ballesteros, Ángela Boix, Leticia Etala, Beatriz Jaén y Macarena Sanz (que se alterna con Belén de Santiago).
Así explica la compañía la sinopsis del espectáculo: «Nos encontramos frente a los preparativos de un evento -tal vez una boda- donde nada es lo que parece. La pantalla nos guía a través del proceso de ensayos de una compañía en crisis que no consigue ubicar su última creación. Comienza el desfile y el escenario se convierte en una pasarela por la que transitan personajes reales y alucinados, proyecciones, tal vez, de los fantasmas que habitan nuestro imaginario. De pronto, nos adentramos en la historia de tres personajes femeninos en plena crisis y asistimos a su transformación: tres cuentos fantásticos que desembocan en lo monstruoso en un viaje sin retorno. En este laberinto de dimensiones superpuestas, todo está servido para disfrute del que asiste atónito a la mascarada, mientras que los actores de la compañía viven el propio espectáculo como un dispositivo que atenta contra sí mismos y que, poco a poco, va enloqueciendo y amenazando el desenvolvimiento de la obra».
«Un espectáculo es la promesa del siguiente», dice Juan Ceacero, que asegura que «en ‘Los Remedios’ estaba enterrado de alguna manera ‘Cluster’. Ambos estaban en el territorio de la autoficción, y este espectáculo es la reacción. Es un pacto con la mentira, todo es ficción».
El espectáculo se desarrolla en una especie de evento, de convite, de falsa boda, dice Ceacero. «Una boda es siempre un lugar no real. Hay algo onírico, en el espectáculo, algo del universo de ‘8 1/2’, de Fellini. Estamos en el imaginario del director o del dramaturgo de la propia obra». Otro referente, asegura, es Jorge Luis Borges. «De hecho, es un personaje que aparece en el espectáculo, porque en él hay una idea de cuento muy borgiana: la idea de las ficciones, de cuentos que son laberínticos y están hablando de cómo se está construyendo el propio cuento».
Asegura el director que en ‘Ficciones’ «hay mucha reflexión sobre para qué sirve la ficción, cuál es su propiedad. Si la ficción puede devorar la realidad en algunos casos o ser el antídoto frente a esta realidad». El teatro tiene la vocación de cuestionar, no de responder preguntas; Ceacero retuerce está máxima cuando dice que «en el planteamiento de la pregunta es donde está la respuesta. De hecho, al plantear de qué va la función, el tema mismo de la función está planteado como una pregunta. ¿Cuál es el sentido de estas preguntas de las que hablaba antes? Y también otras: ¿Cómo sería ser otra persona? ¿Cuál es la naturaleza de la propia ficción? ¿En qué podemos creer? En el tema de que la creencia está en la base de la propia interpretación: creer en lo que hago».
El espectáculo, sigue Ceacero, «llega físicamente. Hay algo intelectual, claro, pero también algo visceral que lleva al espectador a la infancia, al juego. ‘Ficciones’ es como un espectáculo de variedades, en el que jugamos con esta idea de los números, del entretenimiento, del juego».
Y es que ExLímite «no genera espectáculos como producciones, sino que lo que hace es crear espectáculos. Partimos de la idea de viaje, de espectáculo abierto. De alguna manera, la obra tiene vida propia. El director tiene que hacer que esto funcione, pero no conduce el coche. Lo llevan los actores».
