Marcelo Méndez comenzará hoy por la mañana con otra semana de trabajo intenso /Prensa GelP
Pasó la primera semana de entrenamientos del Lobo de Marcelo Méndez. Hoy por la mañana en Abasto, el plantel reanudará las prácticas con las mismas características de los días pasados: mucho trabajo, intensidad, dinámica y presión. Y en esa línea, intentará que el mensaje llegue a los jugadores lo antes posible, ya que en las primeras cinco fechas de la competencia no tendrá caras nuevas.
El uruguayo sabe que esta posibilidad en Gimnasia es un paso adelante en su carrera que le abre otras posibilidades futuras si pretende seguir los caminos de Diego Alonso, Gustavo Poyet, Alexander Medina o Gustavo Munúa, compatriotas que tuvieron la chance de dirigir en el fútbol europeo.
En su primer contacto con los hinchas en los festejos por el centenario del Juan Carmelo Zerillo, Méndez dijo que espera “estar a la altura y cumplir con los objetivos”. ¿Cuáles son esos objetivos? Ahí se abren un par de líneas de análisis entre los resultados deportivos y la necesidad de ser un club vendedor, aunque ambas van de la mano, entrelazadas en la necesidad de mejorar futbolísticamente.
Por un lado, Gimnasia debe mejorar mucho su cosecha de puntos si pretende entrar en la conversación de la clasificación a copas internacionales. Los 16 puntos que cosecho el Lobo con Madelón le permiten estar en el vigésimo puesto entre 28 equipos, lejos de la zozobra de 2023 (le saca 11 puntos a Tigre, que hoy perdería la categoría por la tabla anual) pero a 8 puntos de los últimos equipos que pelean el ingreso a la Copa Sudamericana 2025.
“Gimnasia tiene que estar en competencias internacionales y potenciar jugadores del club, pero nosotros también tenemos nuestro propio objetivo que es ser competitivos y luchar por cosas importantes”, dijo Méndez la semana pasada en una entrevista radial con Sport 890 de Montevideo. Justamente, el entrenador charrúa es considerado en su país como alguien que potencia a los jugadores que encuentra en cada club.
Esa búsqueda de volver a las copas internacionales tras el fallido paso por la Sudamericana del año pasado (cuando Sebastián Romero como DT no tuvo los recursos para una competición en la cual Gimnasia nunca estuvo cerca de clasificar) va de la mano también de una necesidad de puntos para olvidarse definitivamente del tema promedios, ya que Gimnasia hoy comenzaría en la sumatoria solo 6 puntos por encima de Sarmiento (61 contra 55) sin contar a los ascendidos del año próximo ni a Tigre (posible descenso) ni a los que suman distinto, Independiente Rivadavia y Deportivo Riestra, uno de los cuales podría bajar por promedio a fin de este año.
Dentro del cronograma de mayo, sin fecha aún, podría aparecer otro partido que debe ser un objetivo: el encuentro contra Atlético Tucumán por los 16avos de final de la Copa Argentina. El Lobo fue finalista y semifinalista de la competición y Méndez festejó con Defensor Sporting la Copa Uruguay 2022. También debería ser un objetivo.
Obviamente, los objetivos superadores a la mera supervivencia en primera división son el resultado de plasmar y luego consolidar una idea de juego para lo que necesita tiempo y trabajo. Es, justamente, lo que busca ganar con estos entrenamientos para tener en claro que necesita (y no tiene en el plantel actual) para jugar de la manera que pretende.
Por lo pronto, es seguro que cuando se abra el mercado de pases Gimnasia apuntará a la búsqueda de un delantero, pero tampoco hay que descartar que tenga necesidades en otros sectores del campo. ¿Tiene el volante central que pretende para su juego? ¿Necesita algún interior que compita con Pablo De Blasis y Lucas Castro? ¿Su conocimiento de Matías Abaldo le permitirá recuperarlo para concretar el buen proyecto que es? ¿La apuesta en defensa será Felipe Sánchez o buscará otro defensor a pesar de las llegadas de Cabral y Canto en los últimos dos libros de pases? Esas preguntas las irá respondiendo el entrenador en función de lo que reciba del equipo en las próximas semanas, tanto en la preparación como en las 5 fechas antes del receso por la Copa América.
