Samuel Flores: «Soy un defensor de la Venta del Batán, porque se puede disfrutar del espectáculo único de ver los diferentes encastes representados»
Cuando el Real Madrid ganó la decimocuarta Champions, sacó Nacho un capote para celebrarlo, siguiendo la tradición que había comenzado Raúl años atrás. Y es que la tauromaquia tiene en el capitán del equipo merengue al mejor embajador en el mundo futbolístico. Así lo ha querido reconocer la Real Unión de Criadores de Toros de Lidia, que ha entregado sus premios anuales en «la casa del toreo de Madrid», como describió Antonio Bañuelos al Hotel Wellington. El «Premio a una trayectoria ganadera ejemplar» ha sido para Samuel Flores, ganadero que podría considerarse creador de un encaste propio.
«La afición me viene de mi padre, que está hoy aquí con mi hermana, y me llevaba desde pequeñito, me acompañaba a las plazas, los tentaderos o las capeas. Y yo también intento inculcarles a mis hijos los valores de la tauromaquia», dijo Nacho en su discurso de agradecimiento de un premio que confesó que le hacía especial ilusión recibir, por todo lo que la Fiesta significa para él. Actualmente, además, está comenzando una nueva andadura como ganadero de la mano de Alejandro Talavante, y lo afronta «con ilusión y con mucho respeto, porque sé lo difícil que es esto». Y terminó diciendo: «Aquí me tenéis para seguir apoyando esta Unión y la tauromaquia».
Acompañado por su mujer Lili, sus hijos y su yerno Adolfo Suárez Illana, recogió Samuel Flores su premio de manos de la Infanta Elena. El ganadero recordó sus inicios al frente de la ganadería familiar, que en cuatro años cumplirá un siglo de antigüedad: «Por circunstancias familiares, acabé llevando la ganadería con 18 años. Han sido más de sesenta años dedicados al mundo del toro y a mantener la genética de este encaste que me entregó mi tío». La RUCTL intercedió para que ese encaste fuera ya propio, y así se le reconoció. «Para mí, la bravura es la entrega absoluta, por tanto, el toro es el único animal del mundo que, cuando es bravo, es capaz de crecerse ante el castigo. Esto lo hemos conseguido los ganaderos con esfuerzo y tesón, y ahora estamos en el mejor momento de la historia del ganado bravo».
Por último, no dudó en tratar un tema bastante polémico: «Soy un admirador de la Venta del Batán. Desde niño iba a ver el espectáculo único de ver los diferentes encastes representados. Hoy en día sería igual de interesante. Comprendo que supone un problema más en el manejo, por el doble traslado, pero mi experiencia me dice que pocas veces ha ocurrido accidente alguno». El actual pliego del Centro de Asuntos Taurinos indica que debe habilitarse ese lugar para la exhibición de los toros que se lidiarán en San Isidro y la Feria de Otoño, teniéndose que exponer un mínimo del 50% de las reses de las ganaderías contratadas. Sin embargo, esto no llegó a hacerse realidad en la práctica, también debido a las pegas que ponían la mayor parte de ganaderos, que basaban su negativa en que no era justo que les tocara a algunos, y otros pudieran no ir.
Cerró el acto Ángel de Otero, Director General de Agricultura, Ganadería y Alimentación de la Comunidad de Madrid, que acudía en representación del alcalde, y que reiteró el apoyo que el gobierno madrileño tiene con la Fiesta: «La ganadería se ha hecho inherente al ecosistema madrileño. La cría del toro bravo va unida al mundo rural y a la conservación del medio ambiente, además de crear empleo. Nosotros vamos a defenderlo y a apoyarlo, en contra de los actuales mantras de falsos ecologistas. La tauromaquia siempre será la Fiesta nacional».
