Fernández interviene la sede del peronismo en Jujuy por avalar represión del gobernador Morales
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El presidente argentino y titular del Partido Justicialista tomó la decisión para “alinear” a la fuerza provincial al posicionamiento nacional.
El mandatario de Argentina, Alberto Fernández, en su calidad de presidente y titular del Consejo Nacional del Partido Justicialista (PJ), ordenó este viernes la intervención de ese movimiento político en la provincia de Jujuy, por avalar la represión y criminalización de las protestas por parte del gobernador de ese distrito, Gerardo Morales.
La información la dio a conocer la portavoz de la Presidencia argentina, Gabriela Cerruti, quien señaló que la intervención se da para poner al PJ de Jujuy “en la misma línea del peronismo en todo el país, de una clara oposición al gobierno y las políticas represivas de Gerardo Morales“.
En la resolución que Cerruti hizo pública, se detalla que el mandatario designó como interventores a los militantes del PJ, Gustavo Adolfo Menéndez y Aníbal Fernández; el primero exintendente del partido de Merlo, en la provincia de Buenos Aires, mientras que el segundo es el actual ministro de Seguridad de la Nación.
Menéndez y Fernández, dice el texto, “ejercerán de manera conjunta todas las facultades inherentes a todos los órganos partidarios, a efecto de realizar todos los actos necesarios para normalizar el Partido Justicialista Distrito Jujuy”. La intervención se hará por un lapso de 360 días.
La reforma y las protestas
La intervención del PJ de Jujuy se da luego de la ola de movilizaciones, fuertemente reprimidas por las fuerzas del orden público, que se registraron en la provincia, para pedir mejores salarios y en repudio a una polémica reforma constitucional provincial de Morales, que, entre otras cosas, criminaliza el derecho a la protesta, según han denunciado organismos de derechos humanos.
Al respecto, en la resolución emitida este viernes, el presidente argentino recuerda que un grupo de legisladores del PJ de Jujuy “votaron favorablemente a la introducción de modificaciones en la Constitución provincial, avasallando y restringiendo derechos fundamentales” consagrados en la Carta Magna.
Por ello, señala que no quedan dudas que las autoridades del PJ de Jujuy “comulgan con un pensamiento totalmente ajeno a los principios y doctrina que fundan el pensamiento justicialista y contradicen el espíritu y la letra” de la Constitución nacional.
La reforma de la Constitución provincial de Morales establece la “prohibición de cortes de calles y cortes de rutas” y de “toda otra perturbación al derecho a la libre circulación de las personas y la ocupación indebida de edificios públicos” en Jujuy. El nuevo texto, que fue aprobado en apenas un mes, no fue consultado a la ciudadanía.
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