A estas alturas, Dua Lipa no necesita presentación. El éxito rotundo de himnos como Don’t Start Now, Levitating o Houdini habla por sí solo. La artista británica ha conquistado, suo merito, un lugar privilegiado en la música pop y tiene muy claro, desde hace varios años, cuál es su misión cada vez que se sube a un escenario: hacer bailar a su público.
“No necesito aprender mi lección dos veces”, recitaba Lipa con cierta ironía en Training season, el enérgico tema que marcó el arranque de la primera noche de su doble cita con la capital. Más de 16.000 personas se congregaron este domingo, 11 de mayo, en el rebautizado Movistar Arena de Madrid para empaparse del ‘optimismo radical’ que irradia su tercer disco, Radical Optimism, publicado cuatro años después de su aclamado Future Nostalgia —una de las joyas musicales del pandémico 2020—.
Aunque, en esta ocasión, las cifras de ventas no han sido, quizá, tan escandalosas, la gran expectación en torno a su gira Radical Optimism Tour ha demostrado que, sin duda, sigue la estela de su predecesora. End of an era, la simbólica carta de presentación del álbum, fue el segundo de los 22 cortes del setlist, en el que también hubo cabida para las versiones.
Como ya hizo el pasado mes de marzo en los recintos de Nueva Zelanda y Australia, donde cantó, respectivamente, Royals de Lorde y Can’t get you out of my head de Kylie Minogue, la albanobritánica volvió a rendir homenaje a uno de los artistas locales del país que visitaba, si bien, esta vez, supuso mucho más que un simple guiño artístico.
Un homenaje a Enrique Iglesias
“Soy muy emocionada y un poco nerviosa, pero quería cantar para ustedes en español”, anunciaba Dua en un castellano claro y fluido, antes de interpretar el icónico Héroe de Enrique Iglesias, en una actuación acompañada de su banda que, salvando las distancias con la versión de Rosalía en el Coachella 2023, hizo mucho más que salvar los muebles.
Para muchos, esta arriesgada e inesperada actuación -de una canción, a priori, tan ajena a su público más joven-, fue una prueba fehaciente de la especial devoción que la cantante siente por nuestro país. Para otros, fue precisamente su palpable ilusión y el dominio del idioma que demostró durante todo el recital lo que le sirvió para sumar aún más puntos a su ya prolongada candidatura simbólica a la nacionalidad española.
En el pasado, ya habíamos visto a la británica codeándose con figuras nacionales como Pedro Almodóvar, recomendando a autoras como Alana S. Portero o perreando en una discoteca junto al actor Aron Piper durante una de sus numerosas escapadas a nuestro país, y, especialmente, a la isla de Ibiza, donde decidió celebrar en el mes de agosto su 29 cumpleaños.
En uno de esos viajes, esta vez a Barcelona, grabó su último videoclip hasta la fecha, Illusion, ambientado en la Sagrada Familia. Por ello, no es de extrañar que haya elegido a Madrid como la primera parada de su gira por Europa. A fin de cuentas, nuestro país ocupa un espacio privilegiado dentro del corazón de la cantante.
Dua Lipa, una española más
Y es que, más allá de levantar al público con los temas electropop más bailables de su repertorio, que no son pocos, y de reafirmar su presencia escénica y su potencia vocal sobre el escenario, que no es baladí, muchos espectadores se fueron a casa anoche con la sensación de haberse impregnado de su ‘buen rollo’ fuera de su faceta de superestrella. En cierto modo, de haber conocido a ‘una española más’, en el mejor sentido.
Sin ir más lejos, el entrañable baño de masas que se dio con sus fans más acérrimos antes de cantar These walls, uno de sus temas favoritos del último álbum, fue una clara muestra de ello. El desparpajo, la soltura y la naturalidad con la que interactuó con su público -en su mayoría, español- no fue solo un ejercicio de simpatía, sino un signo evidente de su “amor” por la cultura y la forma de vivir de la gente de nuestro país.
“Estoy enamorada de Madrid y de España”, expresó Dua, elevada varios metros sobre el suelo alrededor de un círculo de fuego, mientras interpretaba Love again. Sin embargo, no hacía falta que lo verbalizara en en ese cuarto acto del concierto. En realidad, ya se había corroborado con sus menciones indirectas al Madrid más castizo (“This is giving true madrilena”), y con otros guiños más cómicos, como su reacción a los folclóricos gritos de “Guapa y reina” de los asistentes.
Nadie sabe qué sorpresa nos deparará Dua Lipa este lunes en su segunda fecha en el Movistar Arena, lo que está claro es que su lección magistral de ‘optimismo radical’ y baile estará asegurada porque, como ya adelantó en Be the one, uno de los temas más emblemáticos de su carrera que está a punto de cumplir 10 años: “Madrid, you’re the one”. Y si no lo es, desde luego que siga pareciéndolo, por la cuenta que nos trae.