La práctica del transfuguismo se ha generalizado en el país en las únicas décadas causando estragos en el sistema de partidos políticos y provocando un debilitamiento interno en organizaciones tradicionales.
Esa debilidad se acentúa cada vez más ante la falta de una legislación que sea drástica en el castigo de quienes deciden cambiar de un partido a otro, en especial para las organizaciones que ostentan el poder o están más cerca de alcanzarlo.
Esa práctica se ha visto con mayor frecuencia en los últimos meses, donde alcaldes, legisladores, directores de distritos y regidores han abandonado el partido que los postuló, sin que la Ley 33-18 de Partidos, Agrupaciones y Movimientos Políticos imponga sanciones al respecto.
El artículo 140 de la Ley 20-23 Orgánica del Régimen Electoral sobre el transfuguismo, es ambiguo y dice: “Las personas que hayan sido nominadas para ser postuladas por un partido, agrupación, movimiento político o alianza a la cual pertenezca el mismo, a un cargo de elección, no podrán ser postuladas por ningún otro partido en el mismo proceso electoral.
El Frente Patriótico, firmado en 1996 entre los partidos de la Liberación Dominicana (PLD) y Reformista Social Cristiano, para enfrentar al Partido Revolucionario Dominicano (PRD), se puede decir que fue un gran impulso para es práctica.
En los cuatro años siguientes, el PRD hace lo propio para que Hipólito Mejía lograra la presidencia con el apoyo “soterrado” de los reformistas. Incluso, eso ameritó que muchos reformistas fueran incluidos en el gabinete de ese Gobierno.
PLD y transfuguismo
Tras su retorno al poder en el año 2004, el partido morado fue un gran aventajado de esa mala iniciativa, porque agrupó durante años más de 20 partidos en el llamado bloque progresista.
Esas organizaciones le permitieron al PLD permanecer en el poder durante cuatro periodos consecutivos hasta el 2020, año en que fue derrotado por el actual Gobierno que encabeza el presidente Luis Abinader.
PRM y FP
Ahora, en su lucha por el poder el PRM y la Fuerza del Pueblo (FP) mantienen una “lucha campal” para ver quién obtiene mayor apoyo de dirigentes de otras organizaciones.
El primero, cada semana ha estado juramentado políticos del PLD. Por ejemplo la semana pasada, recibió Bolívar Valera, diputado del Santo Domingo Este, y que semanas antes había renunciado al partido que lo postuló a la curul que ocupa.
El segundo, que preside Leonel Fernández, ha sido uno de los mayores aventajado del transfuguismo, partiendo de que las elecciones de 2020 obtuvo un poco más de 5%, en la actualidad, según datos de algunos encuestas se coloca en un 30%.
Sin duda, que la mayor cantidad de adeptos que ha obtenido Leonel es de su antiguo partido: PLD.
Otros
El partido morado, aunque en menor proporción también ha estado recibiendo extra partidos, al igual que el PRD, que lidera Miguel Vargas Maldonado. El partido blanco recibió recientemente el apoyo del senador de La Romana, Iván José Silva, renunciante del oficialismo.
Más afectados
Con la renuncia de dirigentes, además del PLD, el partido más afectado es el PRD. Su primera gran salida se produjo en 1973 con Juan Bosch, luego el conflicto entre José Francisco Peña Gómez y Jacobo Majluta y tercera la dimisión de miles dirigentes para formar el PRM.
Legislaciones
En el caso del PLD, que ha venido exigiendo que se detenga el transfuguismo, cuando impulsó la Ley de Reforma Electoral y la de Partidos Políticos, a pesar del pedido de muchos sectores se negó a sancionar el transfuguismo en el país. Lo propio ha hecho el oficialista PRM con la Ley 20-23 Orgánica del Régimen que no estableció mecanismos en ese sentido.