Pete Hegseth, designado por el presidente electo, Donald Trump, para dirigir el Departamento de Defensa de Estados Unidos, fue investigado en 2017 en relación con un asalto sexual, según confirmó este viernes el Departamento de Policía de Monterey (California).
El supuesto ataque se produjo en octubre de 2017 en un hotel de esa localidad californiana en el que se celebraba una reunión de mujeres republicanas.
La información proporcionada por la Policía solo indicó que la denunciante, que no identificó, presentaba “contusiones en el muslo derecho“. Las autoridades no ofrecieron más detalles sobre la investigación ni los motivos por los que fue cerrada.
La revista Vanity Fair informó el jueves sobre el incidente y dijo que Susie Wolf, designada por Trump para ser su jefa de Gabinete, se enteró de la investigación el miércoles y el jueves se reunió con Hegseth para tratar el tema.
Fuentes consultadas por Vanity Fair indicaron que durante la reunión Hegseth se defendió alegando que el encuentro fue consensuado y que las dos partes se mostraron en desacuerdo sobre cómo se desarrolló la velada. El abogado de Hegseth, en declaraciones a la prensa, defendió a su cliente al señalar que el Departamento de Policía de Monterey descartó el caso.
Por su parte, el director de comunicación de Trump, Steven Cheung, dijo en un comunicado que “Hegseth ha rechazado de forma contundente todas las acusaciones y no se presentaron cargos”.
Hegseth es el segundo nominado por el futuro presidente que se enfrenta a acusaciones de tipo sexual. Matt Gaetz, polémico candidato al puesto de fiscal general, fue acusado de tráfico sexual de una menor e investigado por ello por el Comité de Ética de la Cámara de Representantes, así como por uso de drogas.
Además, en mayo de 2023 Trump fue declarado por un jurado responsable de abuso sexual contra la periodista y autora E. Jean Carroll en 1996.
Hegseth, un antiguo militar que combatió en Irak y Afganistán, trabajaba hasta ahora como presentador del canal de televisión conservador Fox News. Es conocido por defender causas de ultraderecha, como políticas contra los derechos trans y el envío de tropas de la Guardia Nacional al estado de Texas para apoyar la militarización fronteriza.