En la actualidad, la decisión de realizar una mudanza implica un significativo esfuerzo económico e incluye varios desafíos a la hora de evaluar por ejemplo el hallazgo de un espacio habitacional que sea lo más seguro posible. Con el delito adueñándose de los diferentes barrios de la Ciudad, la problemática de la inseguridad continúa siendo una de las preocupaciones más importantes de los platenses, y ese temor -según afirman las propias víctimas- tiene una fuerte implicancia a la hora de tomar una decisión económica que impacta de manera directa en la calidad de vida.
Un ejemplo categórico del “alto costo” de vivir con miedo a la inseguridad se registró en las últimas horas en La Plata donde un hombre, víctima de tres robos en el interior de una vivienda que alquilaba en Barrio Aeropuerto, tomó la drástica decisión de rescindir el contrato de alquiler (con los gastos que eso implica) e irse del inmueble debido al enorme temor de ser nuevamente blanco de delincuentes. Según pudo saber EL DIA basándose en fuentes oficiales, la víctima de este caso vivía, hasta hace unas horas, en un domicilio ubicado en la zona de 607 entre 4 y 5.
“Le robaron tres veces desde que se mudó, ese fue el motivo por el que abandonó el alquiler”, reveló la propietaria de la vivienda ante las autoridades policiales. Lo más triste e indignante según la dueña, es que tras la partida de su inquilino damnificado, el inmueble volvió a sufrir otro ataque delictivo.
Según el relato de otros vecinos que habitan en ese sector de Barrio Aeropuerto, no es la primera vez que una vivienda es blanco de más de un robo. “Es tierra de nadie. Acá los vecinos venimos denunciando diferentes robos en casas, pero no nos escuchan”, dijo un frentista al ser consultado por este diario.
De acuerdo a lo revelado por los investigadores, el inquilino que decidió irse del barrio por los robos sufridos le había entregado las llaves de la morada a la dueña el último jueves por la mañana. En ese contexto la propietaria decidió pasar por el inmueble dos horas más tarde, en donde se disponía a desocuparlo en su totalidad.
“Se acercó a las 10 de la mañana. Tenía que trasladar unos muebles que eran de su propiedad y que habían sido prestados al anterior inquilino”, detallaron los voceros. Tras llegar a escena, la mujer de 46 años advirtió que habían vandalizado la casa para ingresar a robar.
Hasta la bomba de agua
Ya en el interior de la vivienda la dueña constató el faltante de varios muebles que habían sido desocupados por el inquilino. “Cuando llegó corroboró que autores ignorados habían sacado las ventanas para poder ingresar”, indicaron.
Fue en esas circunstancias que la mujer recorrió los espacios del inmueble y observó que se habían llevado “una bomba de agua, grifería del baño, dos cajas de plástico llena de antigüedades (como tazas de porcelanas y teteras) y una garrafa de 15 kg de color lila”. Ya notificados del caso, por estas horas las autoridades intentan esclarecer los hechos y dar con los implicados.