VIDEO. Mascotas agresivas, ¿son las razas o sus dueños?: polémica tras los ataques de pitbulls en La Plata
Con el intervalo de apenas unos días, dos vecinos fueron atacados por perros pitbull. El primer episodio ocurrió en la rambla de 32 y 23 cuando un hombre realizaba su rutina deportiva, y el que le siguió tuvo como protagonista un joven que estaba por ingresar a la casa de sus padres, en Los Hornos, y fue mordido por dos ejemplares. Ante casos recurrentes en la Región, la pregunta suele girar en torno a la peligrosidad o no de esa raza canina y a la responsabilidad que le puede caber a sus dueños cuando suceden hechos como esos.
Nicolás se llama la víctima que sufrió el ataque en Los Hornos. Contó el joven que “alrededor de las nueve de la noche del sábado estaba cerrando el portón y se me metieron dos perros pitbull que me empezaron a atacar de la nada y me estuve defendiendo a las piñas y a las patadas, tratando de sacarlos para afuera, sin que me ataquen la cara o el cuello, que son las zonas mas sensibles”.
El tema, como se dijo, con numerosos ataques de perros de los considerados “potencialmente peligrosos”, ocupa las crónicas desde hace largos años. Tanto que, por caso, en 2018 se materializó en el Municipio la instrumentación de un registro que debía contabilizar en la Ciudad las razas de las especies “molosas”, que son aquellas de contextura musculosa, cabeza grande y mandíbula fuerte. Se desconoce si la Comuna está aplicando esa medida de control sobre las mascotas.
Dentro del debate sobre la peligrosidad de los llamados “mastines” a raíz de su porte, se posicionan quienes sostienen que gran parte de la agresividad de los perros viene con la raza y también quienes aseguran que la “personalidad” de la mascota depende de cómo la hayan educado sus dueños. Es más, se tiende a decir que el perro se configura “a imagen y semejanza de su amo”.
Alejandro Kovalivker, médico veterinario especializado en comportamiento animal, atribuye a cuatro factores los rasgos de carácter que pueda presentar un perro y descarta de plano que un ejemplar sea más agresivo por una cuestión de raza.
“Hay que considerar los factores genético, epigenético, la educación y el contexto del animal. La agresividad no es una cuestión de razas, está en todas las especies. Todos los días hay mordeduras de perros, lo que ocurre es que las consecuencias, el daño son distintos según el tamaño del perro, y entonces también es lo que se da a conocer, pero los toys también muerden”, opinó el etólogo clínico.
Si bien estimó Kovalivker que existe cierto caudal de agresividad que puede relacionarse con causas genéticas, para el veterinario es clave para el desarrollo de la mascota el período de “socialización”, que va desde las tres semanas a los cuatro meses. “La crianza, primero con su madre, y después con los humanos, es esencial, porque hay que enseñarles a construir una manada, donde están incluidos todos los integrantes de la familia e incluso otras mascotas, hasta gatos”, explicó el especialista.
Dedicado al adiestramiento canino, Leandro Mauriño señaló que en nuestro país existen 17 razas de las consideradas potencialmente peligrosas. El instructor de perros dijo que “no se debe estigmatizar a las razas” y que, “en todo caso, se puede hablar de aquellas potencialmente más potentes, con cierta predisposición al dominio”, pero no catalogarlas como agresivas.
ALGUNAS RECOMENDACIONES
Según Mauriño, esas razas caninas “no son para cualquier dueño” y en ese sentido puntualizó que para tenerlas como mascota “se requiere de personas con autoridad, porque el animal siempre va a querer dominar, tanto al humano como a otros animales”.
Mauriño añadió, entre las sugerencias para tener a la mascota cubierta como especie, además de las salidas diarias que ejerza un poco de actividad física y “disciplina”, resaltó, ya que, agregó, “todos los perros necesitan que le digan qué hacer, sino tienen enfrente esa voz de mando, la asumen ellos”.